México enviará un representante a la toma de protesta de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela, programada para el próximo 10 de enero de 2025. La confirmación fue realizada por la presidenta Claudia Sheinbaum durante la conferencia mañanera de este lunes 6 de enero. Sheinbaum subrayó que la postura de México respalda la autodeterminación de los pueblos y que la decisión sobre el liderazgo en Venezuela es un asunto que corresponde exclusivamente a sus ciudadanos.
Sheinbaum explicó que la política exterior mexicana se basa en los principios constitucionales de no intervención y respeto a la soberanía de las naciones. “No vemos por qué no deba ser así”, afirmó, al reiterar que México mantiene relaciones con todos los gobiernos del mundo sin interferir en asuntos internos. La reelección de Maduro, ocurrida el 28 de julio de 2024, ha sido ampliamente cuestionada por sectores opositores que aseguran un fraude en los comicios.
Mientras tanto, el líder opositor venezolano Edmundo González Urrutia, quien se declara como el legítimo ganador de las elecciones con más del 67% de los votos, continúa su gira internacional para recabar apoyos en contra de la investidura de Maduro. González tiene previsto reunirse este lunes con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, luego de encuentros recientes con los mandatarios de Argentina y Uruguay. El Parlamento Español ya reconoció a González como presidente legítimo de Venezuela, generando mayor división en la comunidad internacional.
La investidura de Nicolás Maduro, que gobernará Venezuela hasta 2031, se celebrará en medio de un ambiente de tensión política. González Urrutia aseguró que estará presente en la ceremonia para «asumir sus funciones», lo que anticipa posibles confrontaciones entre ambas facciones. México, por su parte, se mantiene al margen de esta disputa, reafirmando su compromiso con el respeto a la autodeterminación de los pueblos.