El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha designado a Ronald Johnson como su nuevo embajador en México, en sustitución de Ken Salazar. Esta decisión destaca por la importancia del papel que Johnson desempeñará en la relación bilateral, especialmente en el contexto de temas como la migración ilegal.
Una de las primeras tareas que Johnson tendrá que abordar será la amenaza de Trump de imponer un aumento del 25% en los aranceles a México a partir del 20 de enero, si no se detiene la migración ilegal hacia Estados Unidos. Este tema promete ser uno de los puntos clave en su agenda.
Ronald Johnson, quien ya cuenta con una amplia trayectoria diplomática y militar, fue embajador en El Salvador durante el primer mandato de Trump. Es coronel retirado del Ejército de Estados Unidos y trabajó más de 20 años en la Agencia Central de Inteligencia (CIA), donde desempeñó funciones estratégicas vinculadas a América Latina.
Trump destacó en su anuncio que Johnson tiene la capacidad para abordar los retos más urgentes de la relación con México, como la migración ilegal, la lucha contra el narcotráfico y el fortalecimiento de la seguridad bilateral. Aunque la nominación aún está pendiente de la confirmación del Senado, se espera que sea una de las primeras prioridades de la nueva administración.
En un mensaje publicado en su red social Truth Social, Trump aseguró que Johnson trabajará de la mano con Marco Rubio, su candidato para la Secretaría de Estado, para «promover la seguridad y prosperidad» de Estados Unidos, abordando temas cruciales como el tráfico de fentanilo y otras drogas ilegales.