El 11 de octubre se celebra el Día Internacional de la Niña, una efeméride establecida por las Naciones Unidas en 2012 para reconocer los derechos de las niñas y promover su empoderamiento en todo el mundo. Este día resalta la importancia de abordar los desafíos únicos que enfrentan las niñas, desde la desigualdad de género hasta la falta de acceso a la educación y la atención médica.
Este año, el tema «La visión de futuro de las niñas» enfatiza la necesidad urgente de escuchar y actuar en base a las aspiraciones y preocupaciones de las niñas. Las voces de las niñas son poderosas y tienen el potencial de inspirar cambios significativos en sus comunidades y sociedades. Este enfoque también busca resaltar la importancia de involucrar a las niñas en la toma de decisiones que les afectan, asegurando que sus perspectivas sean consideradas en la formulación de políticas.
Además, se reconoce el impacto que las niñas pueden tener como agentes de cambio, capaces de transformar no solo su propio futuro, sino también el de sus familias y comunidades. A través de la educación, el acceso a oportunidades y la promoción de sus derechos, se puede cultivar un entorno en el que las niñas se sientan empoderadas para perseguir sus sueños y contribuir a un mundo más equitativo.
En este contexto, diversas organizaciones y movimientos alrededor del mundo llevan a cabo actividades, talleres y campañas para sensibilizar sobre la importancia de la equidad de género y el empoderamiento de las niñas, haciendo eco del mensaje de que invertir en ellas es invertir en el futuro.