En estos días, Portugal está reviviendo una crisis severa debido a los incendios. En las regiones del norte y centro del país, más de treinta incendios están descontrolados, con un total de 107 focos activos.
Esta situación ha llevado a las autoridades portuguesas a declarar una alerta máxima que se extenderá hasta el jueves. Hasta ahora, se han detenido a cuatro personas en relación con los incendios, y los equipos de emergencia están trabajando intensamente para controlar las llamas, aunque las altas temperaturas están complicando su labor.
Desde el sábado, la ola de incendios ha causado la muerte de cuatro personas y ha dejado cerca de 50 heridos. Debido a la magnitud del problema, Portugal ha solicitado asistencia aérea a la Unión Europea, ya que se enfrenta a más de 30 incendios simultáneos que han desbordado sus recursos. En respuesta a la gravedad de la situación, el gobierno portugués ha decidido mantener la alerta de peligro de incendio hasta el final del jueves.
El segundo comandante nacional de Emergencia y Protección Civil, Mário Silvestre, ha informado que alrededor de 50 personas han resultado heridas en aproximadamente 100 incendios en curso. Según los datos más recientes de la Autoridad Nacional de Emergencias y Protección Civil de Portugal, este martes hay 68 incendios activos, 8 en proceso de resolución y 27 en fase de conclusión. Los incendios más graves están afectando las regiones Centro y Norte del país, con una especial preocupación en el distrito de Aveiro.